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Relación entre indicadores estadísticos socio-económicos y siniestralidad laboral en el sector de la construcción

18/05/2015

Juan Carlos Rubio

Universidad de Málaga, España

El sector de la construcción presenta cifras de siniestralidad preocupantes en comparación con el resto de sectores. En este estudio se analiza la relación entre los índices de frecuencia de accidentes en el sector de la construcción y diversos indicadores como son: el salario mínimo interprofesional, el stress desde el punto de vista del trabajador, y la inversión en educación. Se obtuvieron modelos de regresión lineal utilizando como variable dependiente el índice de frecuencia de accidentes en el sector, y como variable independiente el resto de variables descritas. El aumento del salario mínimo interprofesional, así como el de la inversión en educación por alumno, están relacionados linealmente con la disminución de los índices de siniestralidad en el sector. La mejora de los indicadores estudiados debería de dar lugar a una mejora de la siniestralidad en el sector de la construcción.

La datos de siniestralidad en el sector de la construcción son motivo de preocupación a nivel nacional e internacional debido a los altos índices de siniestralidad en comparación con el resto de sectores (Camino et al 2008, López-Arquillos et al 2012).

Uno de los principales índices que se utiliza para evaluar las condiciones de accidentabilidad de un sector o actividad económica concreta, es el índice de incidencia de accidentes laborales. La oficina Europea de Estadística (Eurostat) define el citado índice de incidencia como:

“El numero de accidentes por cada 100.000 personas empleadas que supusieron más de tres días de ausencia del trabajador de su puesto de trabajo”.

Existen diversos trabajos previos a nivel internacional, acerca de la importancia de los índices de siniestralidad, como es el caso del estudio realizado por Kossoris (1938) en el que se encontró una relación directa entre los accidentes de trabajo en el sector industrial y el ciclo económico, de tal modo que el aumento o reducción de la actividad va ligado de un modo directamente proporcional al aumento o reducción de la siniestralidad. Del mismo modo existen investigaciones posteriores en los que se trataron de conocer las causas de la relación entre siniestralidad y ciclo económico.

Autores como Shea (1990), y Hokkanen (1998) obtuvieron resultados que apuntan que la variación en la carga de trabajo ligada a las necesidades del ciclo económico, es el principal argumento para explicar la relación entre los índices de siniestralidad y los indicadores económicos. A mayor expansión económica, mayor carga de trabajo, mayores tiempos de trabajo que provocan una mayor exposición, y en consecuencia mayor índice de incidencia, ya que la misma plantilla se accidenta con mayor frecuencia.

Otro argumento para explicar el aumento de la siniestralidad en fases de expansión económica, es el aumento de la contratación de nuevos empleados con escasa o nula experiencia mas propensos a sufrir accidentes debido a su inexperiencia (Wright and Lund, 1998; Quinlan, 1999)

Existen diversos estudios económicos en los que a través de modelos de regresión se relacionan índices de siniestralidad laboral como variable dependiente con índices de índole económicos como variables independientes. Viscusi (1979) utilizó la tasa de crecimiento anual del empleo, así como las horas medias semanales trabajadas, Ruser (1985) hizo uso de las horas medias trabajadas semanalmente por empleado, mientras que Fortin y Lonie (1992) utilizaron la tasa de desempleo.

A nivel español destacan trabajos como el de Castejón (2000) que relaciona las variaciones del PIB con la siniestralidad, y como los de Amuedo (2002) y Guadalupe (2003) en los que se estudió la correlación entre la siniestralidad laboral y la contratación temporal.

 


Ver editorial original en: www.prevencionintegral.com